El país charrúa se convertirá en el sexto operador de la aeronave en Sudamérica junto a Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Paraguay.
Embraer anunció este 26 de Agosto la venta de hasta seis aeronaves A-29 Super Tucano a la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU). El contrato, que forma parte de un programa de renovación de flota para ampliar la capacidad operativa de la FAU, prevé la adquisición de una aeronave más el compromiso de adquirir cinco unidades adicionales, con entregas previstas a partir de 2025, incluyendo equipos de misión, servicios logísticos integrados y un simulador de vuelo.
Con este pedido, Uruguay se convierte en la sexta nación en operar el A-29 Super Tucano en Sudamérica junto a Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Paraguay. Debido a su flexibilidad operacional en la región sudamericana, la aeronave es utilizada para varias misiones, principalmente para el control de actividades ilegales, monitoreo de fronteras, reconocimiento y entrenamiento avanzado. Una flota regional de más de 160 Super Tucanos opera en los entornos más austeros y exigentes de Sudamérica, desde la húmeda y cálida selva amazónica, las frías regiones del sur de Chile hasta el calor del desierto más al norte, desde las regiones montañosas de Colombia y Ecuador hasta las costas del Atlántico y el Pacífico.
“Nos sentimos honrados por la decisión de la Fuerza Aérea Uruguaya, otra nación sudamericana, de elegir el A-29 Super Tucano, una aeronave que es referencia en su segmento en el mercado internacional. Con esta adquisición, Uruguay tendrá capacidades diferenciadas que contribuirán en gran medida a la vigilancia de sus fronteras y aumentarán la preparación operativa de la FAU”, afirmó Bosco da Costa Junior, presidente y CEO de Embraer Defence & Security.
«Uruguay busca fortalecer sus capacidades de vigilancia del espacio aéreo y respuesta a amenazas, y para ello se apoya en la tecnología brasileña, que propone una plataforma muy adecuada para estos fines, como son los A-29 Super Tucanos», afirmó el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Omar Paganini.
“Con esta incorporación damos un gran salto en la mejora de nuestras capacidades de defensa y respondemos a las necesidades de control de nuestra soberanía territorial y de lucha contra el crimen en todas sus formas”, afirmó el ministro de Defensa Nacional de Uruguay, Armando Castaingdebat.
“Cabe destacar que desde el año 1981 nuestro país no ha adquirido nuevos aviones de combate. Es precisamente por ello que la referida compra de aeronaves generará una gran motivación y satisfacción profesional dentro de la Fuerza Aérea”, afirmó el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea Uruguaya, General Luis H. De León.
El A-29 Super Tucano es el líder mundial en su categoría, con más de 260 pedidos y más de 570.000 horas de vuelo, de las cuales 60.000 en combate. El número de fuerzas aéreas que operan el A-29 Super Tucano aumenta constantemente debido a su combinación inigualable de características, lo que lo convierte en la opción más rentable, accesible y versátil.
Para las Fuerzas Aéreas que buscan una solución probada, integral, eficiente, confiable y rentable en una sola plataforma, junto con una gran flexibilidad operativa, el A-29 Super Tucano ofrece una amplia gama de misiones como apoyo aéreo cercano, patrulla aérea, operaciones especiales, interdicción aérea, JTAC, controlador aéreo avanzado (FAC), coordinador aéreo y táctico (TAC), ISR armado, vigilancia de fronteras, reconocimiento, escolta aérea, entrenamiento básico, operacional y avanzado, transición a cazas de superioridad aérea, entrenamiento JTAC/LIFT y FAC.
El A-29 Super Tucano es el avión multimisión más eficaz de su categoría, equipado con tecnología de última generación para la identificación precisa de objetivos, sistemas de armas y un conjunto completo de comunicaciones. Su capacidad se ve reforzada por avanzados sistemas de aviónica HMI integrados en una robusta estructura capaz de operar desde pistas sin pavimentar, en entornos austeros y sin infraestructura. Además, la aeronave tiene un concepto de mantenimiento sencillo, que ofrece altos niveles de fiabilidad, disponibilidad e integridad estructural con bajos costes de ciclo de vida.